La empresa, la de mayor capacidad de producción en España, cuenta en la actualidad con 3 granuladoras, aunque la demanda de pellets ha hecho necesario ampliar producción con la incorporación de las 7 nueve máquinas.
El mayor aumento de la demanda, y que ha motivado principalmente el incremento de la producción, se ha registrado en el pellet para alimentación animal, que se destina a los países árabes y donde experimentarán un crecimiento de producción del 100%. En el caso del pellets para calefacción y uso industrial, será de un 50%. Un producto que, en este caso, se destina sobre todo al mercado nacional, así como a Francia e Italia.
El incremento de la producción conllevará una ampliación de la plantilla de Arapellet formada en la actualidad por un total de 28 personas. Los planes de la empresa contemplan la incorporación de entre 12 y 15 profesionales, algunos de los cuales empezarán ya a contratarse el próximo mes de febrero. Principalmente, se demandan mecánicos, operarios de maquinaria y personal de mantenimiento, entre otros perfiles.
La adquisición de la maquinaria para ampliar la producción concentra una buena parte de los 10 millones de inversión de Arapellet. Además de los 7 para las nuevas granuladoras, la compañía también ha invertido 3 millones de euros en un parque fotovoltaico para autoconsumo. Esta instalación cuenta con una extensión de 6 hectáreas y tiene una potencia de 4,3 megavatios pico (MWp). En total, está formada por más de 8.000 paneles, sobre 72 seguidores.
La inversión en este parque fotovoltaico para autoconsumo va pareja a la ampliación de la producción en la planta de Erla, además de tener el objetivo de tratar de ser autosuficientes, apostar por la sostenibilidad al ser energía renovable y tratar de paliar los altos costes de la electricidad, ya que es una empresa electro-intensiva.
La generación eléctrica del parque fotovoltaico de autoconsumo equivaldrá al consumo anual de más de 1.500 hogares. Además, se estima que se producirá un ahorro anual de emisiones equivalente a 2.806 toneladas de CO2 y a la plantación anual de casi 4.000 árboles