Aragón cerró el último trimestre de 2022 como la cuarta Comunidad Autónoma con menor tasa de desempleo (9,41% frente al 12,87% nacional), pero sin recuperar todavía el nivel de empleo previo a la pandemia como sí se ha logrado ya a nivel nacional.
El crecimiento del desempleo en un trimestre habitualmente positivo es el dato más negativo de la Encuesta de Población Activa, reflejando la desaceleración de la actividad productiva derivada del aumento de los costes de materias primas y energía, y el impacto de la inflación en las empresas. En Aragón, este aumento del paro ha alcanzado el 4,01% trimestral y el 3,91% interanual, frente al 1,47% y -2,57% nacional, respectivamente.
Especialmente grave ha sido el parón en Construcción, reflejado en una subida del desempleo en 1.400 personas, pese a su descenso respecto al año anterior. Este dato muestra el grave impacto del aumento de precios de los materiales y la energía en el sector, que también queda patente en el hecho de que alrededor de un tercio de las licitaciones de obra pública estén quedando desiertas.
La parte más positiva de la EPA del IV trimestre en la Comunidad Autónoma la ofrecen la ocupación y la población activa. Pese a las dificultades, la población ocupada se ha mantenido en Aragón: -0,01% trimestral frente al -0,40% nacional. Bien es cierto que la comparativa respecto al cuarto trimestre de 2021 no es positiva para Aragón (-0,85% de ocupados) y sí para el conjunto d España (1,38% de aumento).
No obstante, resulta positivo que la ocupación haya roto la tendencia descendente en Aragón, que todavía cuenta con 7.200 trabajadores ocupados menos (-1,22%) que en el último trimestre precovid (IV de 2019). España sí ha logrado superar ese nivel con un 2,49% más de ocupados (497.000 personas) que en esas fechas.
El aumento trimestral de la población activa en un 0,36% (2.300 personas) también es un buen dato para Aragón frente a su descenso nacional (-0,16%) ya que desde el inicio de la pandemia Aragón ha perdido 11.800 activos (-1,80%) frente a su crecimiento del 1,40% en el país.
Aunque con más luces que en trimestres anteriores, la evolución trimestral del empleo vuelve a reflejar la inestabilidad del mercado laboral y las dificultades e incertidumbre de la situación económica y empresarial sin que desde el ámbito político se adopten medidas que apoyen a las empresas, de las que depende más del 80% del empleo y a las que se continúa cargando, junto al aumento de costes/inflación, con mayor presión fiscal, legislativa, trabas burocráticas sin las necesarias políticas de contención del gasto público, estabilización ni llegada real de fondos europeos al tejido productivo.