El mercado laboral aragonés evoluciona positivamente. Con 143 desempleados menos que el mes anterior, el paro registrado en oficinas del Inaem en febrero pasado cayó un 3,88% en tasa interanual hasta las 52.585 personas, número que permite al Ejecutivo autonómico acercarse al objetivo de que el total de hombres y mujeres apuntados en las oficinas de empleo sea inferior a 50.000 a corto o medio plazo.
"Febrero nos deja una noticia para el empleo en Aragón, y es que el paro ha vuelto a descender, consolidando la tendencia positiva de los últimos meses", ha resumido el director general de Política Económica del Gobierno aragonés, Javier Martínez, al valorar los datos publicados este martes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
En cuanto al comportamiento de los diferentes sectores productivos, tras resaltar que el número de parados en el sector de la construcción fue en febrero pasado el más bajo de la serie histórica en Aragón (2.834), Martínez se ha mostrado convencido de que los anuncios de nuevas inversiones empresariales ya se están traduciendo en obras que crean nuevos puestos de trabajo, con un crecimiento en el número de afiliaciones a la Seguridad Social. Servicios, ha dicho también, está siendo un nicho importante de nuevos empleos, mientras que la industria aguanta, a pesar del momento 'valle' que atraviesa la industria del automóvil. En total, respecto a febrero de 2024 el número total de parados en Aragón se redujo en 2.124 personas.
El desempleo ha bajado en las tres provincias, tanto en variación mensual como anual. Así, respecto al mes anterior, ha descendido más en la de Teruel, un 2,64 % y en 124 personas; un 0,06 % en Huesca, con 4 desempleados menos, y un 0,04 % en la de Zaragoza, con 15 parados menos. De esta forma, el número total de desempleados en la provincia de Zaragoza se ha situado a finales de febrero en 40.860, en la de Huesca en 7.157 y en la de Teruel en 4.568.
"La evolución del empleo en febrero ha sido positiva en Aragón, pese a que el comportamiento plano de las principales economías europeas no favorece la actividad de nuestras industrias ni a nuestro comercio exterior, especialmente en la automoción y los bienes de equipo", han indicado fuentes de la patronal CEOE. Junto a ello, han añadido, "la incierta situación política y geoestratégica internacional obligan a ser cautos en las previsiones que, en principio, consideramos positivas para Aragón, dada la fortaleza y diversificación de nuestro tejido productivo, así como el impacto positivo de las inversiones que está atrayendo la Comunidad y que deben tener un efecto tractor sobre el conjunto de las empresas y la economía aragonesa".
La presidenta de Cepyme Aragón, María Jesús Lorente, ha señalado por su parte que “febrero es un mes de transición, por lo que es positivo que haya un descenso en los datos del paro pero estamos hablando de un descenso muy leve". Sin embargo, ha recordado que "es fundamental que no perdamos de vista que el problema estructural sigue estando presente en nuestra economía. Hay que ver qué posibilidades tenemos de recuperar a esas personas desempleadas, cuántas se pueden formar y reconvertir”.
UGT Aragón, por su parte, ha considerado que "a pesar de los buenos datos, existe muchas mejoras estructurales que realizar, para lo cual hay que persistir en la senda de mejora hacia unos empleos mejor remunerados y con un tiempo de trabajo razonable, así como abordar el reforzamiento de las políticas activas de empleo para los colectivos más afectados como las mujeres, migrantes y mayores de 50 años, y afrontar el reto de la dispersión territorial del desempleo, para poder atender las necesidades de todas las personas en el territorio aragonés".
Para CC. OO., "el mercado laboral sigue tendiendo a la estabilidad que impulsó la reforma laboral de 2021, de manera que la tasa de temporalidad en enero ha sido del 12,15%, el valor más bajo registrado. Esta tasa es también un punto menor que hace un año y 15 puntos menores que la que se registraba en enero de 2021". La mejoría, ha reseñado también el sindicato, ha sido mayor para las personas jóvenes, que en el último año ha registrado un descenso de casi 30 puntos, desde el 48,54% hasta el 18,56%.