La multinacional estadounidense de comercio electrónico Amazon prevé abrir antes de fin de año su centro logístico de La Muela con el objetivo de atender el pico anual de ventas, que empieza con el ‘Black Friday’, continúa con las Navidades y se remata con las rebajas. Este almacén será el que más empleo genere de los cuatro que tiene la compañía en Zaragoza y su entorno, dado que está previsto que roce los 1.500 trabajadores, un tercio más de la plantilla con la que llegará a contar el gran almacén central de Plaza cuando esté a pleno rendimiento.
El Ayuntamiento de La Muela otorgó hace tres semanas la licencia de inicio de actividad a Amazon Road Transport Spain, la sociedad bajo la que opera sus centros logísticos nacionales, tras comprobar el cumplimiento de los requerimientos que se le notificó a una serie de deficiencias detectadas en la iluminación de emergencias.
La nueva revisión municipal se hizo hace unos días y la superó sin problemas, por lo que ahora solo resta que la multinacional ponga en marcha las instalaciones por fases como hace en el resto de sus almacenes.
Fuentes implicadas en el proyecto explican que el equipamiento interior finalizó antes del verano con los últimos remates por parte de todas las empresas subcontratistas implicadas. Solo queda instalar el cartel de Amazon en la fachada, que la empresa lo ha dejado para el último momento porque aún sigue sin oficializar su existencia ni mucho menos sus planes de apertura ante los medios de comunicación.
Sin embargo, en Google Maps y en la web oficial de la compañía ya figura el centro logístico con su nomenclatura técnica, ZAZ8, y con una detallada descripción de las tareas en las que se especializará, las de un centro de ‘media milla’, a las que ya se refiere en presente. "Ahí es donde recibimos los pedidos de los clientes, los clasificamos por destino final y los preparamos para garantizar las entregas más rápidas", indica en su portal de oferta de empleo Amazon Jobs.
Este tipo de almacén se especializa en recibir los suministros de proveedores y de sus complejos central para preparar los pedidos de los clientes para su distribución a través de las estaciones logísticas, como la que se inauguró en otoño de 2021 en Plaza.
La tramitación de la licencia del inicio de actividad se remonta al pasado mes de mayo, pero se ha alargado por la necesidad de subsanar las citadas deficiencias en las luces de emergencia. Para lograr el permiso, la compañía también tuvo que dar cuenta de la preceptiva comunicación a los trabajadores
El complejo ocupa 141.836 metros cuadrados en el extremo este del polígono Centrovía, en el que se ha construido una planta de clasificación de paquetería de 35.420 metros cuadrados y en la que trabajarán 1.452 personas en triple turno si se cumplen las previsiones reflejadas en el proyecto tramitado en su día ante las administraciones implicadas.
Un año de espera
La compañía valenciana Itercon acabó las obras hace un año, pero la ralentización de la venta por internet llegó a la empresa a suspender su inmediata puesta en servicio. La decisión se adoptó pese a haber invertido algo más de 18 millones en el almacén logístico. Esta misma estrategia se decidió en el caso del gran almacén de escala europea de Plaza, de 60.396 m2, que iba a abrir en el verano de 2022 y acabó haciéndolo a principios de la pasada primavera tras invertir una ingente suma, 175 millones, para convertirlo en uno de sus centros más punteros en tecnología.
Aunque no se ha estrenado, la empresa ha utilizado la espera para probar el funcionamiento de los equipos instalados. Cualquier conductor que pasa por la autovía de Madrid puede comprobar que siempre hay vehículos aparcados en la explanada acondicionada para este fin delante de la nave y de las oficinas anexas y que incluso hay luz en interior por las noches.
